jueves, 27 de agosto de 2009

Velada Romántica

Tengo un amigo muy especial, pero muy muy especial. Nos lo pasamos muy bien juntos y nos metemos en cada aventuraaaaa. Salimos a cenarrrrrr, nos vamos de coooopas, hacemos senderiiiiismo, vamos de tiendiiiitas, al ciiiiine, en fin, lo que hacen todos los amigos. ¡Pues NO, lo que hacen todos los amigos NO! Este chico es muy especial y suele prepararme veladas románticas muy originales. La última: con eso de que a veces no se te ocurren cosas y te apetece hacer algo diferente, va y me lleva a ver cómo despegan los aviones de Barajas. Yo me adapto a todo y lo importante es sacar cosas positivas y didácticas de cada situación. Así que ¿por qué no ir a ver despegar aviones al descampao que hay cerca del aeropuerto? El camino era más bien de bueyes así que el furgón, de esos que te llevas de viaje porque cabe hasta el sillón de la abuela, no hacía más que pegar botes. Se nos salía el cocido por las fosas nasales. Después de un buen rato llegamos a la frontera. Una valla con un agujero en medio; seguramente hecho por delincuentes que pretenden subirse a las ruedas del avión sin que nadie les vea y poder viajar a América donde son Libres para siempre (hasta que la policía americana, fina ella, les pilla y les mete en el calabozo y después de 20 años luchando para que no los frían en la silla eléctrica, los deja salir y se convierten en ciudadanos, Alias “si yo sólo quería visitar la estatua de la libertad”). Cerca de donde paramos había una especie de montaña hecha con maderas y no sé qué más; parecía la cabaña del tío Tom pero a lo poblao gitano. Mi amigo, que sabe tanto de la vida, me dice que es una chabolita y que seguramente duerme alguien ahí. Yo, pensando “No jodas”, decido subir la ventanilla y bajar el seguro de la puerta. No vaya a ser que me atraquen y me jodan la velada romántica viendo despegar y aterrizar 747´s. O la velada romántica viendo como los delincuentes se escapan por el agujero de la valla fronteriza. A mí, más que una chabolita me parecía un preparao cutre de la hoguera de San Juan. Y me imaginé la época en la que quemaban a las brujas. ¡¡Con lo bonito que es pasear en barca por el retiro!! Había más gente mirando aviones subir y bajar, así que no me sentí como una gilipollas. Pues ahí no acaba la cosa. De vez en cuando veías un coche, gente que viene a dormir la siesta a un sitio tranquilo, gente que viene a relajarse y escapar de la contaminación de la ciudad, gente que necesita estar sola y alejarse de la muchedumbre… el caso, es que no entendíamos muy bien qué necesidad tiene la gente de irse tan lejos y a un sitio tan feo teniendo parques tan bonitos en Madrid y alrededores. La sierra madrileña, los lagos, la playa de Madridddddd. En fin… ¿Qué necesidad?, ¡coño!, pues la que tienen los hombres solos, de encontrarse unos con otros en un sitio discreto. ¡¡Jodeeeeer, que estábamos en un “Pinar Gayyyyyy”!! ¡¡¡Por eso tanto hombre solo en coche!!! No preguntéis cómo nos dimos cuenta, pero nos reímos lo que no existe en las escrituras, que se dice.
Si es que no te meto un hostión porque me recuerdas a Calimero deprimido toa la vida!!

PD: aún a estas alturas me sigues sorprendiendo gratamente

1 comentario:

Jackie Silva dijo...

Hola estimada blogger
Estuve visitando tu Blog y está excelente, permíteme felicitarte.
Sería un gusto contar con tu blog en mi directorio y estoy segura que para mis visitas será de mucho interés.
Si lo deseas no dudes en escribirme a jackiexanky@hotmail.com
Exitos con tu blog.
Un beso
Jackie